El Ministerio Público (MP) prefiere no adelantar si emprenderá una investigación contra del abogado Ricardo Alfredo Grijalva Rodríguez, mencionado con insistencia por Salvador González Álvarez, Eco, durante la audiencia de declaración como anticipo de prueba en el caso de defraudación aduanera "La Línea"
Eco, testigo clave en el proceso, acusó al abogado Grijalva de amenazas y destrucción de evidencias para evitar que vinculara al expresidente Otto Pérez Molina y a la exvicepresidenta Roxana Baldetti en el robo millonario. El colaborador eficaz denunció ante el juez Miguel Ángel Gálvez que dicho abogado lo buscó a él y a su familia para evitar que declarara sobre las reuniones que había sostenido con el exmandatario.

Ricardo Alfredo Grijalva
Grijalva se presentó a su casa para amenazar a su familia, aseguró Eco, el economista que confesó haber administrado la línea de sobornos en las aduanas, a pedido de los exmnadatarios. Solo días después de su detención, dijo el testigo, el letrado le pidió las direcciones y claves de los correos electrónicos que servían para comunicarse con los dos exgobernantes y borró la información.
Eco asegura que Grijalva acosaba a su familia, que les ofreció Q20 mil a cambio de que no hablara. Incluso le reclamó que el administrador de La Línea hubiera contratado los servicios de otro abogado que no era el nombrado, aparentemente, desde la Presidencia de la República.
Bajo el amparo del poder
Hasta ahora, Grijalva había permanecido en las sombras, aunque ha sido un abogado cercano al poder: cercano a Juan de Dios Rodríguez, expresidente del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) quien fungió como mano derecha del expresidente Pérez .
Grijalva tuvo conexiones con Blanca Stalling, magistrada de la Corte Suprema de Justicia, cuyo hijo laboró con Rodríguez en el Seguro Social. Grijalva conoció a Stalling mientras ella era directora del Instituto de la Defensa Pública Penal. Incluso trabajó bajo sus órdenes, en acciones legales de la Defensa Pública, para legalizar la Asociación Interamericana de Defensorías Públicas, que coordinaba la exdirectora y como defensor público de oficio.
El hijo de la magistrada se encuentra sujeto a un proceso de corrupción derivado de contratos irregulares en el Seguro Social.
En ese contexto Grijalva trató de impedir que Eco hablara. Aunque no lo logró, su estrategia evidencia los intentos por evitar que el testigo clave revelara que Pérez y Baldetti conocían de las operaciones fraudulentas en aduanas y que se beneficiaban económicamente de la red ilícita.
Esta semana, ContraPoder le presenta los detalles de cómo ocurrieron estos intentos fallidos por silenciar a Eco. No se pierda la edición digital, a partir de mañana por medio de la aplicación en la GoogleApp y la versión impresa, a partir del viernes en puntos de venta.